Publicada en 1869, Historia de dos ciudades se trata de una novela distinta a la que Dickens nos tiene acostumbrados. Los protagonistas no son los niños o adolescentes desválidos o ilegítimos, sino simplemente dos ciudades: el París revolucionario y el Londres coetáneo. Inspirada en la Revolución francesa de Thomas Carlyle. Dickens da a luz un drama puramente novelesco, pero derivado de la ficción, de la situación histórica evocada, de apasionante interés en su desarrollo y con una grandiosa y elocuente moraleja incluida, que atrapa al lector desde el primer momento.